Evocación de excéntricos personajes. Viajes al país de la
infancia, donde se acentuaban las peculiaridades del narrador – declarado y
confirmado juego entre palabras y sonidos. Un “tal” Syd Barret ejerció de
alquimista de la psicodelia británica. Grabó caprichosas canciones en
solitario. Los restantes miembros de Pink Floyd tuvieron a bien honrar la
memoria del compañero caído en expediciones lisérgicas (“Shine on you crazy diamond”).
Barret, empero, sigue ratificando cuán inmensa es su sombra a pesar de su
inevitable ausencia. Gracias por ese Viaje Sensorial que recién arribó a su
medio siglo, Syd…
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