El grupo, alguna vez conocido como “The New Yardbirds” continuó explorando el lado más oscuro y pesado de la música rock que The Yardbirds a mediados de la década de 1960, y rara vez disminuyó la velocidad. Sin embargo, la crítica de Harrison tuvo la consecuencia deseada.
Empujó a Jimmy Page a escribir una balada que se
convirtió en una de las mejores y más queridas canciones de Led Zeppelin.
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