Su principal punto de contacto con el mundo exterior era su hermana, Rosemary, quien vivía cerca. A raíz de su muerte, dijo que “su pasión era su pintura”. Esto era cierto, incluso el propio Barrett dijo una vez: “Bueno, creo que eventualmente me convertiré en pintor”.
Artista generoso en sus años posteriores a Pink Floyd, Barrett estuvo produciendo arte hasta su muerte. A su manera, Barrett quemó muchos de los lienzos después de completarlos. Por qué razón, no está claro.
Sin embargo, logró fotografiar sus obras completas antes de morir. Su hermano Ian sostiene que no era tan recluso como todo el mundo afirma: “Solía ir a Londres en tren y visitar galerías de arte, así que todo este asunto de la reclusión es inexacto”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario