Frescor de los vidrios al
apoyar la frente en la ventana. Luces trasnochadas que al apagarse nos dejan
todavía más solos. Telaraña que los alambres tejen sobre las azoteas. Trote
hueco de los jamelgos que pasan y nos emocionan sin razón.
¿A qué nos hace recordar el
aullido de los gatos en celo, y cuál será la intención de los papeles que se
arrastran en los patios vacíos?
"Nocturno" (fragmento), de
Oliverio Girondo
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