El punk también fomentó la
idea de que las mujeres ocuparan roles musicales decisivos dentro del marco de un
grupo, en lugar de simplemente proporcionar un bello rostro en el centro del
escenario.
Los subestimados The Adverts
fueron uno de los primeros grupos británicos en tocar en The Roxy, el legendario club londinense, su líder fue el
cínico, intenso (y masculino) TV Smith,
mientras que la bajista de la agrupación era la icónica Gaye Advert, una de las punks más icónicas del Reino
Unido, acerca de la cual el escritor musical Dave
Thompson sugirió: "su maquillaje de ojos de oso panda y su
omnipresente chamarra de cuero definieron
la cara del punk femenino hasta bien entrada la próxima década".
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