"Punk rock: ¿crucial o
falso?" Era la pregunta planteada en la portada de Melody Maker del 7 de agosto de 1976, debajo de las historias sobre
Eric Clapton y John Lennon.
El ensayo de Caroline
Coon pasó a describir la nueva escena punk para un público lector que todavía
se estaba acostumbrando a la naturaleza "simple e inexorable" de la
música, ya que el ímpetu detrás del movimiento crecía a ritmo semanal.
"Desde enero, cuando los
Sex Pistols tocaron su primer
concierto", escribió, "ha habido un aumento lento pero constante en
el número de músicos que sienten lo mismo. Agrupaciones como The Clash, The Jam,
The Buzzcocks, The Damned, The Suburban
Studs y Slaughter and the Dogs.
La música que tocan es ruidosa, estridente y más allá de las consideraciones de
sabor y delicadeza. Como dice Mick Jones,
de The Clash: "Es
maravillosamente vital".
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