"Inmediatamente levanté
mi brazo, ya que fui soprano en el coro
de mi escuela en Río de Janeiro. Pero no tenía idea de por qué me preguntaba
eso Paul".
De esta manera, Bravo y Gayleen Pease, fueron acompañadas al legendario Estudio Dos, donde se habían
efectuado todas las sesiones de grabación de The Beatles desde 1963.
"Los cuatro estaban
grabando esta canción", agrega Bravo. "De repente escuché las instrucciones de Paul y John
sobre la parte que necesitaban que cantáramos. Estaba compartiendo el mismo
micrófono que Paul y John, quien siempre había sido mi Beatle favorito".
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