Un depredador que atraviesa el Serengeti
podría reconocer un espíritu afín en ‘The sky is a poisonous garden’, en
términos de ritmo e incisión.
Es el vínculo más fuerte de Bloodletting con el sonido punky anterior del grupo, pero también
establece el truco de apertura del álbum al conducir a las brumas de
'Caroline'.
Esta última es una historia de fantasmas de ensueño con una
sensación de cine negro, posicionando a Napolitano como la respuesta gótica a
Stevie Nicks.
No hay comentarios:
Publicar un comentario