Eran tiempos extraños. La
nueva música incluso se estaba discutiendo en los periódicos “adecuados”. El
periodista y cineasta Tony Palmer se convirtió en el crítico pop de The Observer y ungió a The Beatles como “los
mejores compositores desde Schubert”. “Y fui ridiculizado por eso”, dijo.
En febrero del 68, la BBC encargó a Palmer que produjera un
documental serio sobre la cultura pop. All
my loving era una instantánea en cápsula del tiempo de Pink Floyd, The
Beatles, Zappa, Cream, The Who y Jimi Hendrix, intercalada con imágenes de la guerra
de Vietnam. “Estas personas trataban de decir algo importante”, explicó Palmer.
“En lugar de simplemente escribir 'Doobee doobee doo'”.
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