Pensar en Robert Plant simplemente como el joven
vocalista de Led Zeppelin es prejuiciarlo.
Es, por supuesto, la razón por la que conocemos su trabajo, y la música que
escribió e interpretó con Jimmy Page
y el grupo entre 1968 y 1980 estableció las bases para su larga carrera.
Plant ha
sido, empero, un artista solista
vibrante y vital. Votado como la
mejor voz en el rock, Robert Plant absorbía la música desde que era un
adolescente.
Plant se ha reinventado con éxito desde el arquetipo del frontman rock en
algo mucho más fiel a su corazón: un absorbente
diverso de raíces, country, blues y soul.
Nunca ha sido estereotipado, se
ha mantenido al margen de su personaje rock en muchas ocasiones, desde su
nacimiento del rock and roll episodio Honeydrippers
en la década de los 80, hasta su maravillosa mezcla de raíces que fue Raising Sand, el álbum ganador de Grammy
que hizo con Alison Krauss en 2007.
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