Una verdadera
bomba sexual del rock del Nueva York
de los años 70, Deborah Harry
recibió el sobrenombre el día en que su novio Chris Stein se cansó de oír el silbido hacia su entonces novia.
Acababa de encontrar el nombre del grupo con el que viajaba su hermano Harry y
su novia...
Entonces, jugando al cliché, no fue tanto la agradable voz mezzo-soprano de Debbie lo que generó
el éxito del grupo, sino la inteligente comercialización de su imagen – lo mismo
que el negocio y la producción calibrada de las canciones de Blondie.
"Me
desperté una mañana y me cansé de ser
Blondie, así que decidí ser Dirty
Harry, y así soy hoy. La chava, adoptada por los comerciantes de Florida a
la edad de tres años, ya había sido parte de Stilettos, una agrupación pre-punk de Nueva York.
Camarera en un
club de Playboy, Debbie era una chava que forjaba, ya, su reputación. Otro
factor de éxito es la presencia en la primera hora del primer día de
transmisión de MTV del clip "Rapture", filmado por Andy Warhol.
Así, Deborah Harry, siempre
activa, navegó ingeniosamente entre las
imágenes, del rock al pop, desde una carrera en plan solista hasta los Jazz
Passengers, el cine underground del Downtown 81 hasta el Videodrome Cronenberg.
Empero, la Polaroid que la mantendrá es la de la novia enamorada, colgando del
teléfono…
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