Los muchachos se gradúan de
la parte posterior del bar al frente de la arena en Highway to Hell (1979), con un
sonido más limpio, cortesía del futuro esposo de Shania Twain, el productor Robert
John "Mutt" Lange. Las canciones son más compactas, los coros fortalecidos
por las armonías del equipo de rugby. El momento del premio: Scott cierra el
desgarrador "Shot down in
flames" con una carcajada digna de bruja del oeste.
El genio de Mutt Lange
consistía en traducir toda la sangre y el sudor de su trabajo en
el estudio Roundhouse de Londres en
un álbum que suena sin esfuerzo, sin preocupaciones, espontáneo. A AC/DC nunca
le faltaron balones, energía o agresividad, pero en Highway to Hell sus golpes fueron entregados con precisión y equilibrio, impactando con
una fuerza que detuvo el corazón.
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