Pero la eterna debilidad del grupo persistió:
sus miembros apenas escribían. Lo que, curiosamente, se convirtió en uno de sus
puntos fuertes, ya que los obligó a transformar y personalizar el material de covers en interpretaciones que llegarían
a hacer suyas. Así, la protesta folklórica de Hamilton Camp, "Pride of
man", se convierte en un escalofriante tema rockero apocalíptico.
"Gold and silver", que comenzó como
un ensayo estilo "Take Five", de Dave Brubeck, se convierte en un riff-swap de guitarra dual que oscila
ferozmente y que presagia entrenamientos posteriores de Allman-Betts.
No hay comentarios:
Publicar un comentario