La tarea de un productor musical
implica una amplia visión general de la cultura
popular: justo antes de Highway 61,
Bob Johnston produjo "Hush Hush
Sweet Charlotte", un éxito estadounidense Top 10 para la pasionaria Patti
Page, la artista femenina más vendida en los años 50.
La ocupación también
requería humildad. "¡Mi trabajo no era ser un héroe y decirle a Paul
Simon, Bob Dylan, Johnny Cash o Willie Nelson qué diablos hacer!", refiere.
"Pensé que si quieres ser un héroe o si quieres tomar crédito, consigue
otras personas con quienes trabajar. No trabajes con estas personas. No era
como otras personas que buscaban ser el
próximo Phil Spector".
Johnston, inicialmente, escribió
canciones de soundtracks para Elvis
Presley. Luego llamó la atención del legendario John Hammond, de Columbia,
a quien describió como "el mejor músico que haya existido jamás". El "Sr. CBS" descubrió a todos los blues,
a toda la gente del jazz, Bob Dylan,
Bruce Springsteen, Paul Simon y cientos más. Él fue mi
mentor todo el tiempo. Era con él con quien iba a buscar ayuda".
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