La canción se convirtió en un éxito pop,
situándose en el Top 20 y arrojando a
Concrete Blonde a la atención nacional. Algún crédito por este logro debería ir
al productor Chris Tsangarides, quien le dio al grupo el brillo suficiente para
sobresalir sin sacrificar nada de su nerviosismo.
Tsangarides es mejor conocido
como productor de metales, pero se familiarizó con el mundo alternativo a
través del trabajo con agrupaciones como Killing Joke y Lords of the New Church.
No hay comentarios:
Publicar un comentario