Ella se sirve un vaso más.
- Tú sí puedes cerrar sarcófagos y adornarlo todo
con gusanos. Puedes irte por dos meses y regresar diez años después. Odio
leerte en los diarios, saber que te va bien en las guerras. Odio soñarte. Odio
no poder desear que una bomba te use de alimento. Odio cerrar los ojos y que me
asfixies. Y aún odio esperarte.
Ella piensa que ya es tarde.
-
Fue bueno verte. Fue bueno haber estado contigo.
-
Voy al baño. Si vuelvo y no estás… cuídate en
esas guerras.
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