Temas como "Outlaw
Blues" y "On the road again" revelan a un desafiante Dylan
cuestionando su lugar en el movimiento pop cargado de política del que había
sido una parte tan instrumental y que sirvió como parte del trabajo de
conducción de Dylan.
Y mientras la primera mitad de Bringing it all
back home se deleita con el deseo de Dylan
de 'rock', el álbum cierra con el cantante en su momento más contemplativo, con
la líricamente épica "It's alright ma (I'm only bleeding) y el
tangiblemente sincero "It’s all over now, Baby Blue", que proporciona
una sensación de cierre del proceso.
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